Resume este post:
Mezclar láser alejandrita y diodo es totalmente posible y, bien aplicado, puede multiplicar resultados. Esta guía rápida de Grupo Estético te explica cuándo compensa, cómo combinar y qué evitar.
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Mezclar láser alejandrita y diodo: ¿se puede y cuándo compensa?
La combinación de láser alejandrita y diodo puede ser una estrategia perfecta para optimizar los resultados para cualquier paciente o fototipo. Actualmente ya existen máquinas de depilación que combinan ambas tecnologías, la clave está en que cada tratamiento es capaz de llegar donde el otro tiene limitaciones. Es decir, mientras que el alejandrita funciona mejor en piel clara y pelo fino; el diodo ofrece mayor seguridad en fototipos más altos y zonas profundas.
En cambio, los riesgos aparecen cuando el ajuste de parámetros no se realiza correctamente. Esto puede provocar irritación o pérdida de eficacia.
Estos son algunos de los escenarios donde la combinación es eficaz:
- Paciente con fototipo cambiante a lo largo del año: en pacientes que se broncean con facilidad, el diodo permite continuar el tratamiento con seguridad en verano. En cambio, cuando vuelva la piel clara, el alejandrita garantizará la durabilidad del tratamiento láser.
- Para el vello ultra-fino: cuando las sesiones ya han hecho efecto y el vello está fino, el diodo deja de detectar bien y, en estos casos, se introduce el alejandrita.
- Zonas con comportamientos distintos: en estos casos no es que un láser sea mejor que otro, sino que cada zona pide una tecnología distinta para obtener el máximo rendimiento.
- Folículo profundo en piel clara: cada láser llega a una parte distinta del folículo, y juntos trabajan como un equipo para obtener un resultado más uniforme y eficaz.
Alejandrita vs diodo: diferencias clave
A pesar de que el láser alejandrita y el láser diodo son dos tecnologías eficaces, cada uno actúa de manera distinta según las características de la piel y de vello:
- Longitud de onda:
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- Alejandrita 755 nm: ideal para piel clara y vello fino o medio
- Diodo 808-810 nm: es un tratamiento más profundo perfecto para fototipos medios y oscuros con vello grueso
- Folúculo/dermis: el alejandrita tiene una actuación más superficial y el diodo lega a las raíces profundas
- Piel oscura/clara: el diodo funciona mejor en pieles morenas u oscuras, ya que su luz se absorbe menos en la superficie y puede llegar al folículo sin riesgo para la piel. Por el contrario, el alejandrita funciona mejor en pieles claras porque su luz es muy atraída por la melanina, cosa que molestaría a las pieles más morenas.
- Pelo fino/grueso: el Alejandrita destaca por su eficacia en fino medio y el diodo, en pelo grueso.
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Protocolos seguros para combinar
Combinar alejandrita y diodo puede ser muy eficaz, pero solo si se aplican protocolos claros que respeten el tipo de piel. Estos son los usos más seguros:
- Alternar por sesiones:
La intención de un buen protocolo es aprovechar los beneficios de cada tecnología sin sobrecargar la piel. Una estrategia útil es 3 sesiones de diodo para reducir densidad y trabajar raíces profundas, seguidas de 2 de alejandrita para pulir el vello fino o resistente.
- Alternar por zonas:
Se recomienda el uso de diodo en zonas profundas (ingles, axilas o piernas) y alejandrita para facial, brazos o líneas de alba donde el vello es más fino.
- Ajustes técnicos
Un buen profesional se encargará de ajustar la fluencia, el ancho de pulso y el enfriamiento en cada transición de láser para mantener seguridad y eficacia.
¿Cuándo NO mezclar? Contraindicaciones y mitos
A pesar de la eficacia comprobada del tratamiento, hay algunas situaciones en las que no se recomienda la mezcla:
- Bronceado activo: aumento del riesgo de quemadura
- Tratamiento médico con fármacos fotosensibles: puede incrementar la reactividad de la piel. Se aocnseja preguntar al médico previamente.
- Patologías cutáneas activas: cualquier dermatitis, infección o herida se debe curar antes de aplicar cualquier tratamiento en la piel.
- Expectativas irreales: el método solo funciona cuando está indicado y correctamente ajustado.
Fototipos y tipos de vello: cómo elegir el orden
Para elegir bien qué láser aplicar será necesario estudiar el tipo de fototipo, el grosor del vello y la profundidad del folículo:
- Fototipo I-II (piel muy clara a clara): Responden mejor iniciando con alejandrita, ideal para pelo fino o medio.
- Fototipo III (intermedio): lo más eficaz es combinar ambos.
- Fototipos IV-VI (piel morena a oscura): se recomienda comenzar y mantener con diodo, más seguro por su menor absorción epidérmica.
Por otro lado, es mejor el diodo en pelo grueso y profundo y el alejandrita en vello fino.
Resultados, sesiones y mantenimiento: qué esperar si combinas
Antes de aplicar el tratamiento, es muy importante que el cliente conozca qué puede esperar de ellos:
- Porcentaje de reducción de vello:
La combinación puede lograr una reducción del 80–90%, aprovechando la precisión del alejandrita y la profundidad del diodo.
- Cadencia entre sesiones:
Se recomienda 4–6 semanas en facial y 6–8 semanas en corporal, ajustando según la respuesta y la fase de crecimiento del vello.
- Repaso anual
Una vez haber obtenido resultados reales, una sesión de mantenimiento anual suele ser suficiente.
- Manejo de pelo residual fino
Si queda vello muy fino, el alejandrita es el más eficaz para perfeccionar el resultado.
Equipos y calidad: elegir plataforma y servicio técnico
La elección de los equipos es clave en la calidad del resultado final. Estos son los aspectos técnicos en lo que te tienes que fijar:
- Marcado CE y certificaciones: son garantía de seguridad.
- Spot y sistemas de refrigeración: un buen enfriamiento por zafiro o crioterapia protege la piel.
- Consumibles y mantenimiento: que los materiales del equipo que se deterioran estén bien calibrados, esencial para conseguir resultados uniformes.
- Formación y soporte postventa: contar con buena formación y un servicio técnico que responda rápido evita fallos durante el trabajo y te ayuda a no perder tiempo ni dinero cuando surge un problema.
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